De Benidorm a Santiago
- Rafael Lago Gomez
- 27 ago 2019
- 3 Min. de lectura
Miguel nos manda la crónica de la tercera etapa.
Etapa 3:(26/8). Almansa-Alpera-Alatoz casas del cerro- Alcalá del Júcar-Casas Ibáñez- Villamalea.(100 kms). Etapa complicada la de hoy, más por las circunstancias en las que se ha desarrollado que por el perfil en sí mismo.
Me he levantado a las 6:30 en Almansa para aprovechar al máximo las primeras horas del día ya que se esperaba una gota fría por esta zona.
He tenido que perder media hora buscando un bar abierto donde desayunar, por lo cual no he podido salir hasta las 8:00 de una mañana más propia de otoño, entre nieblas y unas nubes amenazadoras que me han acompañado durante la mitad de la jornada.
Los primeros 25 km entre Almansa y Alpera han transcurrido un altiplano entre sucesivas subidas y bajadas. Después una sucesión de campos labrados paralelos a la vía del ave y ha comenzado a caer una fina lluvia que me ha obligado a acelerar el ritmo para no quedarme atrancado por el barro.
He llegado a Alpera a las 10 y he parado a tomar un café justo cuando apretaba un poco más la lluvia, ante lo cual he comenzado a dudar si debía seguir hacia delante o buscar albergue allí mismo.
He desmontado toda la carga de la bicicleta y la he protegido con impermeables para poder continuar ya que lo peor de la tormenta lo anunciaban para hoy a las 18 horas.
Mientras hacía unas fotos a la iglesia de Alpera ha vuelto la lluvia y una señora del pueblo se ha acercado a mí para aconsejarme que me dirigirse al Ayuntamiento a pedir hospedaje ya que la cosa pintaba mal.
Aún así he decidido continuar ya que los partes meteorológicos preveían lo peor a partir de las 18 horas. Cuando llevaba recorrido casi la mitad del camino hacia Alatoz ha venido un momento muy delicado ya que me había equivocado en un cruce y comenzaba a llover de nuevo por lo cual no sabía si volver hacia atrás o continuar. De nuevo he decidido seguir hacia delante ya que creía poder llegar a mi destino antes que la tormenta cómo así ha sido.
He llegado a las 2 a pesar de tener un pequeño percance con una cabra montesa que se me ha cruzado y no sé cuál de los dos se ha asustado más, creo que he sido yo.
En el supermercado de Alatoz de nuevo las gentes del pueblo me han recomendado parar, pero como soy bastante cabezón he montado en la bici para continuar y justo en ese momento ha llegado otro ángel del camino, Miguel Ángel que no ha dudado en coger su bicicleta y llevarme a la salida del pueblo para indicarme el camino correcto y más fácil. Un rato después he llegado a Alcalá del Júcar.
He aprovechado para visitar un poco el pueblo y comer un bocadillo ya que eran las 2:30. De postre una subida infernal de unos 3 km y después una larga recta de unos 10 km con viento de costado para llegar a Casas Ibáñez. Desde allí otra recta larguísima de unos 14 km y por fin he llegado a Villamalea dónde me he dirigido al polideportivo municipal en el cual me he encontrado con el encargado de las instalaciones, el señor Alonso que me ha cedido muy amablemente uno de los vestuarios del campo de fútbol, me ha enchufado el termo para tener agua caliente se ha ido a hacer una copia de la llave para entregármela y además me ha regalado una botella de agua, otra gran persona de las que se conocen en el camino.
Mañana debo esperar a que amanezca y comprobar los partes meteorológicos para no meterme en un lío. Si no lo veo claro mejor quedarme aquí, aunque no es lo que pretendo ya que cada día que pasa me encuentro más fuerte y no quiero pasar demasiado tiempo lejos de mi familia.
P.D: disculpadme si me enrollo demasiado pero los días dan para mucho y me paso la mayor parte de ellos hablando solo conmigo mismo ya que solo tengo conversaciones cuándo paro a comprar o llego a mi destino. Salud para todos y que tengáis felices sueños.
Inicio de la cuarta etapa. Buenos días. Sigo en Villamalea. Esta noche ha caído la mundial.... Me he quedado sin luz y he dormido poco ya que tenía una gotera bastante grande y aunque no la tenía sobre mí, entre los truenos y demás...
Además llegue aquí con un problema mecánico y gracias que nada más levantarme he conseguido que me cambien el disco de freno. Ahora estoy desayunando y todavía no se si saldré ni a qué hora.
Ahora mismo no llueve pero hasta mañana las predicciones no son muy buenas y los caminos están embarrados. Haré unas llamadas a los ayuntamientos que hay más adelante y ya veré lo que hago.
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